jueves, 22 de marzo de 2007

Venganza


Zzzzzzz, zzzzzzz, zzzzzzzzzz zumbaba el taladro ante la mirada aterrada del maltratador de animales. Atado férreamente a la silla con cinta de embalar y la boca tapada con el mismo material, sólo era capaz de expresarse con el movimiento de sus ojos, que crecían desmesuradamente ante la real perspectiva del dolor que se avecinaba. La blanquecina desnudez de sus carnes fofas brillaban ante el efecto de la luz sobre la capa de sudor frío, de pánico, que cubría todo su cuerpo y el pelo se le aplastaba sobre su cráneo a modo de gorra. Cuando la fina broca metálica comenzó a perforar su rodilla, de manera limpia, apenas dejando asomar un hilillo de sangre, el muy cerdo gritó, sordamente, y cerró los ojos, incapaz de ver el trabajo de la estruendosa máquina sobre su cuerpo y deseando que ese vano gesto conjurara el dolor. ¡Pobre infeliz, todavía no sabía que esto acababa de empezar!. Tras retirar la broca, con un seco tirón, permanecí unos instantes contemplando al infortunado. Lloraba y movía la cabeza suplicando que no lo torturara más. No me enterneció lo más mínimo; no iba a tener clemencia de alguien que apaleó a su perro, atado con una cadena, hasta la muerte. Ahora, las tornas habían cambiado, y yo iba a vengar al pobre animal, fiel hasta el final de sus días a alguien que no lo merecía. A mi memoria acudían las imágenes de tan cobarde crímen (grabadas por un vecino) y se me hervía la sangre, impidiendo el afloramiento de cualquier rasgo de piedad y alentándome a continuar con mi labor. Así, seleccioné una broca de mayor grosor y la introduje por el mismo camino que la anterior. Indiferente o más bien, si soy sincero, disfrutando del dolor del cretino, extraje la broca y permanecí unos instantes observando como suplicaba, mudamente, que acabara con la tortura. Acerqué mi cara a la suya y sonreí con maldad a la par que abría un frasco de sal gruesa. Tras enfundarme unos guantes, metí mi dedo índice en la herida, haciéndolo girar para que el conducto quedara lo más despejado posible, y comencé a rellenarlo con puñados de sa,l sin borrar la sonrisa de mi rostro y ansioso de terminar la tarea para repetirla otra vez al cabo de unos minutos. Operaciones análogas se repitieron, en la otra rodilla, manos y codos, a lo largo de las horas siguientes. Cuando ya me encontraba cansado y decidí no proseguir el castigo, envolví al cobarde en un plástico y cargué con su pesado cuerpo, inconsciente desde hacía rato, hacia mi coche y lo tiré sin contemplaciones en el maletero. Monté en el vehículo y conduje los quinientos kilómetros que distaban hasta su pueblo, de donde lo había secuestrado una tarde que paseaba por los campos de alrededor. Lo dejé atado, con cinta de embalar, al cartel, que junto a la carretera, daba la bienvenida a tan tristemente célebre localidad, donde la mayoría de vecinos defendían al individuo para vergüenza de toda la nación. De vuelta a casa, escuchando música clásica, me consolaba con la certeza que ese individuo no volvería a maltratar a un animal en toda su miserable vida.



* La imagen corresponde a mi ex perra; LUBA.

140 comentarios:

Germánico dijo...

Jajaaaaajaaaajajajajaajjajajajjaaaaa

¿Te puedes creer que me he reído durante todo el relato?.

¿De dónde sacaré yo semejante crueldad?.

He pensado en dos cosas: en unas imágenes que pusieron hace poco en televisión sobre un gallego que apaleaba implacablemente a su perro (grabadas por un vecino indignado), y en las torturas de la película Hostel (una de ellas ,tal cual la cuentas, con el taladro). Claro que en Hostel era algo completamente carente de sentido o significado fuera de la mente truculenta del asesino, mientras que en este hay una razón....

En fin, excelente. Mi humor negro te lo agradece de corazón.

¡¡¡¡Pobre!!!!

¡¡¡¡Pobre!!!!

¡¡¡¡Pobre Perro!!!!

Carlos Paredes Leví dijo...

No intentaba resultar gracioso así que, o yo erré con mi objetivo o tú andas con el sistema emocional desequilibrado. Y sí, acertaste en tus intuiciones sobre mi fuente de inspiración: fue ese hijo de puta que mató con saña a su indefenso perro.
Un saludo.

Germánico dijo...

Lamento que no le veas el lado cómico a tu propia creación.

Hay algo verdaderamente siniestro y a un tiempo angelical en vengar a un pobre chucho de esa manera. Supongo que eso es lo que ha creado en mi mente la sorpresa que trae la hilaridad.

Carlos Paredes Leví dijo...

Comprendo tu hilaridad pero sigo sin coincidir con la supuesta comicidad del texto. ¡Qué le vamos a hacer!.

Germánico dijo...

Luego has perpetrado el texto con la seriedad del asesino...

Anónimo dijo...

jajajajaaaaaaaaaaaajajajaj jjaja

Ni yo tampoco pude parar de reír, amigo.

No sé, tal vez dejó al descubierto una faceta macabra de mi ser, pero lo cierto es que tu texto me ha encantado.
Como dice me amigo Germánico, pobre perro!
Que viva el humor negro interior! jajaja

Carlos Paredes Leví dijo...

Juan Pablo y Germánico: estáis peor de lo que aparentáis, y no es poco. Si os parece bien, propongo que continuéis otra semana con los psicofármacos.

Germánico dijo...

¿Otra semana?....¡¡Pero si tengo que estar 2 años!.

Tú sobre todo no lleves a cabo tu proyecto.....¡¡Recuerda a Raskolnikov!!

Carlos Paredes Leví dijo...

Si Lombroso levantara cabeza...¡¡¡¡
Cómo necesitáis unas sesiones de elctroshocks¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Germánico dijo...

¡Pues si que te lanzas tu rápido a torturar!....¡Electroshocks ni más ni menos!....pero si eso es sólo para catatónicos. Tu crueldad si que es una forma de locura....ay

Y eso que no hemos matado a ningún perro.

Anónimo dijo...

Carlos, creo sinceramente que deberías plantearte seriamente la salud mental de algunos de tus lectores!!!

Ellos sa habrán reído, pero a mi se me ha puesto un mal cuerpo!. Ahora que bien pensado, yo habría hecho lo mismo, es más lo hubiera llevado al pueblo arrastrado por una correa de perro, al más puro estilo del oeste jajaja.

Besos crueles!!

Germánico dijo...

¿Salud mental?...¿Por ejemplo la tuya, Mavi?

¡Quien esté libre de locura que tire la primera piedra!

Carlos Paredes Leví dijo...

Germánico, te leo y no te reconozco. Dejá ahora mismo la botella de orujo en el aparador. Ya bebiste bastante por hoy. Ah, y no vuelvas a mezclarlo con las magdalenas, que ya sabes que está contraindicado y luego te queda una resaca de aúpa.

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Mavi; tú eres de las mías (y no me refiero sólo a que seamos Aries).
Sobre lo de estos enfermos...la verdad es que no puedo subir mucho el listón porque de lo contrario, mis posts apenas tendrían comentario.
A ver si hay suerte y aparece pronto alguna terapia eficiente.
Un saludo.

La Concertista dijo...

Hasta que aparezca la terapia no nos queda otra que convivir con la violencia de algunos....

No me resigno, me duelen en forma y fondo, me planteo de qué se rellenan algunos cuerpos y sus mentes...

Carlos Paredes Leví dijo...

Cada uno arrastra sus propias patologías.
Acerca del relleno de algunos; es un auténtico misterio, insondable y cuyo significado se nos escapa.

Germánico dijo...

Te dejo con tus amigas. Te dejo con tus patologías.

Ah, y recuerda, cuando quieras suicidarte solo has de arrojarte desde tu ego al vacío......

Salud, y buena suerte. Quizás la merezcas, después de todo.

Carlos Paredes Leví dijo...

Germánico:
Mi comentario, al referirme a las patologías, no iba dirigido a ti, sino a quienes son esclavos de su violencia. Sobre el relleno, iba también en relación al mismo tipo de individuos.
Sobra lo de mi ego y agradezco tus deseos de buena suerte.
Ya he visto que me has borrado de tus enlaces. Tu mismo.

Ijon Tichy dijo...

Carlos, tu texto es de humor negro, pero negro oscuro, negrísimo.

Al leerlo he sonreído. La risa vino con los comentarios.

Por cierto, creo que Batiola, conoce el caso gallego de (casi) primera mano. Si le veo le mandaré por aquí.

Carlos Paredes Leví dijo...

Ijon: yo, te soy sincero, lo escribí en estado de indignación. Que a alguien le parezca de humor negro, me parece legítimo y aceptable, no tengo nada que objetar al respecto. Uno debe asimilar que sus textos sean interpretados de manera distinta a la intención con que fueron creados.
En cuanto a los comentarios, parece que lo que se desarrollaba con humor y tolerancia se truncó en algún punto.Yo lo achaco a algún/os malentendido/s.
Sobre lo de quien conoce el caso en concreto, te ruego que no lo mandes. Porque en primer lugar, no quiero polémicas gratuitas más que las ya tenidas, y en segundo, porque mi post fue concebido de modo genérico y no individualizando en un caso concreto.
Un saludo.

Ijon Tichy dijo...

En lo que escribía y se publicaba veo que en efecto ha habido algún malentendido.

Espero que se solucione.

Carlos Paredes Leví dijo...

Por mi parte no hay ningún problema, Ijon.

Anónimo dijo...

A mí este post me provocó una enorme tristeza.
Un beso

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Gabriela.

Anónimo dijo...

Vaya, me voy un momento y cuando vuelvo encuentro un huracán.

Carlos, voy a dejarle aquí un mensaje a Germánico si no te importa.

Germánico: Siento si he dicho algo que te haya molestado, te aseguro que no era mi intención, mi post quería ser jocoso nunca insultante. Y te aseguro que nunca podría presumir de mi salud mental :)

Besos!

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Mavi. Se agradece tu intención.

Lebeche dijo...

Me recuerda a Tarantino en la escena de la tortura de Reservoir dogs (vaya casualidad lo de dogs). Mediando en la polémica sucede como con Tarantino, hay gente que le horroriza y hay gente que en la exageración ve un humor soterrado. A mí personalmente no me ha hecho gracia. La única objeción que yo le pongo al asunto es que yo, además, le hubiera puesto los güevos a cocer lentamente mientras taladraba sus articulaciones.
Como decían nuestros queridos Les Luthiers... "haya paz... ¡haya paz!... ¡¡¡¡haya paz!!!!. :)

Carlos Paredes Leví dijo...

No se me había ocurrido, Lebeche, que quizás en mi subconsciente se agitaran imágenes de "Reservoir dogs". Podría ser........
Ah, y recuerda que La Paz, se encuentra en Bolivia.
Saludos.

Anónimo dijo...

Buenaaass...
ehhh...
algún problema?

Carlos Paredes Leví dijo...

Ninguno digno de mención, querido Juan Pablo

Anónimo dijo...

No, digo, porque me pareció que se habían sucedido un par de malentendidos.
Eso, malentendidos. En perjuicio del código de honor implícito entre nosotros. "si hay algo que decir, se dice, no se dá a entender...".

Anónimo dijo...

Le felicito sr.Paredes Levi por haber borrado el comentario ofensivo lanzado contra la concertista o contra usted (porque no me quedó claro).
Mis saludos.

pietrapómez dijo...

Jodeeeer, Carlos...ya se me jodió el buen rollo post-siesta!! Yo que, como Schopenhauer, cuanto más conozco a los hombres, más quiero a mi perro, haría un ley contra los maltratadores de animales, una terapia en plan La naranja Mecánica pero sin Beethoven.
Juan Pablo, a partir de ahora te bautizo como El Pacificador!

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Anónimo. Suprimí el comentario a que usted se refiere, porque pensé iba dirigido hacia otra persona. En principio lo dejé, porque lo creí una broma pero, comentarios posteriores del mismo autor, me hicieron ver lo errado de mi creencia.
Ahora, a raíz de su comentario me pregunto si era yo el verdadero destinatario.

Carlos Paredes Leví dijo...

Comparto tu punto de vista, Pietra y no sábes cuánto extraño a mis perros.

princesa del vértigo dijo...

Guauuuu, esto supera las ejecuciones públicas en mi Reino. Mi látigo no llega a horadar de la misma forma que el taladro, pero te aseguro que los tacones de aguja son más efectivos que el dedo.

Desde que pasé por el garrote vil a todas las reinas consortes de otros reinos (por cierto, me dejaste plantada con la botella de chadornais bajo el brazo) esto está de capa caída, así que he pensado que lo de los maltratadores de perros y animales varios podría dar mucho juego para organizar una cruenta-masacre-orgiástica, con mucho sentido del humor, eso siempre. En particular me relamería haciendo sufrir un poquito con el taladro a los cocineros de caracoles en salsa a la madrileña por una doble razón: la primera saboreándolos ya que son uno de mis platos preferidos y después cargándome al cocinilla por maltratar a los pobres animalitos dejándoles morir de asfixia e inanición denro de un saco, ahogados en sus propias babas...puaggggg, animalitos!!!!

Por supuesto quedáis todos invitados, ya sabéis que con la dondición de una botellita acorde con el plato estrella.

Por cierto compadrito, vos sabés bailar tango? Creo que hoy voy a darme un voltio por un milonguita a caminar un rato por la pista.

Te mando un mordisco donde más te duela, que va más acorde con el tema del post.

Carlos Paredes Leví dijo...

Tu reaparición, Princesa, como siempre, de modo impetuoso y sin reparar en efectos colaterales. Me encanta.
- Nadie, salvo los profesionales, sabe bailar el tango. El que te diga que sí y sea, por ejemplo, cajero de un banco; te está mintiendo.
- Los caracoles los suelo comer en la calle Toledo, muy cerca de la Puerta del mismo nombre. El bar se llama Los Caracoles, y suelo acompañarlos de cerveza negra y amigos. Si los como en casa, mía o de otro, entonces abro un buen Rioja o un Ribera del Duero (no soy escrupuloso).
- Siempre me he preguntado porqué en las películas porno ellas no suelen quitarse los zapatos de tacón y porqué llevan esa lencería de colores tan espantosos (turquesa, verde, amarillo, fucsia...).
Recojo el mordisco y lo devuelvo.

Anónimo dijo...

Carlos
Llevé una fotocopia de tu post de ayer y todas mis compañeras de oficina quedaron fascinadas.
Me dijeron que si sería posible que pusieras una foto en tu blog.
kiss

princesa del vértigo dijo...

¡no me digas que conoces los Caracoles de pta. Toledo! ¡y además te los comes!ya mismo estamos quedando. No consigo que nadie me acompañe allí, la gente es muy escrupulosa para lo que quiere. Este domingo en concreto estuve más de media hora en la puerta intentando convencer a dos amigas sin ningún éxito. Cada vez que salgo con alguien lo intento, pero siempre infructuosamente.

JO....qué mísera vida la mía.

En cuanto a lo del tango, conozco a unos cuantos profesionales de esos que dices (durante muchos años estuve inmersa hasta el tuétano en el mundo del baile, bueno más bien llevo ese mundo inmerso en mi alma), pero cuando me refiero a saber bailar no es sólo a hacer piruetas como autómatas sino a sentirlo y transmitirlo. Yo no sé más que el pasito básico y mis ochos (muy chulos, por cierto) pero me dejo hacer (si es que saben hacerme como es debido, claro)

Oye tú, el mordisco ha sido certero, ay qué me relamo de dolor!!

Anónimo dijo...

Calos, o sos argentino o comés caracoles... una de dos.

Lebeche dijo...

Aquí en mi pueblo hay un riojano que hace unos caracoles (a la riojana, of course)que están riquísimos. También los riego debidamente con un vino que trae el tipo de su tierra. Por cierto que el también conozco el bar de la pta de Toledo.

princesa del vértigo dijo...

Genial, quedada multitudinaria para caracolear... y olé

princesa del vértigo dijo...

Para el argentino de la Argentina, todo es compatible si se mezcla en la medida adecuada.

Vente pa los madriles y lo pruebas

pietrapómez dijo...

Eeeeeh, ¿qué pasa? ¿caracolada y nadie me invita? Me siento como Lou Reed en la canción "All tomorrows parties" en la que habla de un tío que siempre llega a las fiestas cuando se han acabado!!!Noooo...me apunto a la fiesta babosa

Anónimo dijo...

Listo princesa, si vos me invitás será un honor. Eso sí, yo llevo el kerosene, para bajarlos.

princesa del vértigo dijo...

PUes claro que estás invitada, ahora mismo vengo de tu blog. Iba a decírtelo allí pero me he puesto un poco triste y melancólica recordando aquel fatídico día.

No tengo mucho tiempo para comentar más que a algunos pocos habituales, pero te leo de vez en cuando. Es curioso pero cuando paso por estos lares y el termo siempre pienso en tí, te busco, no sé por qué. Ya me declararé en condiciones tomándonos esos caracoles y ese vinito(s).

Besotes, guapa.

princesa del vértigo dijo...

Juan Pablo, cuidadín con lo que bajas... te puedes llevar muchas sorpesas

pietrapómez dijo...

Ya. No es habitual encontrarse un texto de esas características en mi blog, pero fue un desafío "memero" y me costó un huevo. El próximo será más de la tónica de siempre (unas risas y eso). Reinona, vives en Madrid, no? Digo por lo de los caracoles (juraría que ya me lo dijiste pero mi memoria es de un pobre...)

Anónimo dijo...

Perdón? no te he comprendido princesa

pietrapómez dijo...

Amigos: me da que nos dejaron solos , el dueño se fué a comer una buena entraña y se dejó el trastero abierto...se me ocurren unas cuantas maldades!!

Anónimo dijo...

Es verdad, que hoy es jueves y toca!
Esa banda de argentinos lo está llevando a la perdición al pobre Carlos...
Pietra, oremos para que sólo le quede agua mineral al cantinero!

Carlos Paredes Leví dijo...

Joder, qué cantidad de comentarios en un rato que me fui¡¡.
Princesa: la verdad es que si tus amigas tienen escrúpulos con los caracoles........... (interpretación libre).
El tango, tenés razón, sólo se comprende a través del sentimiento.
¿No me digas que sos de las que disfrutan con el dolor?. En ese caso, no puedo ayudarte porque, a mí, me sangran los nudillos enseguida.
Saludos.

Lebeche dijo...

Los viernes, para Carlos, deben ser el peor día de la semana. ¡Qué paradoja!

Carlos Paredes Leví dijo...

Juan Carlos, yo soy omnívoro. No sabés que bien sientan los caracoles con unas cervecitas antes del asado. Te lo recomiendo.

Carlos Paredes Leví dijo...

Bienvenido al club caracolero, Lebeche. A la riojana? hummm, ya estoy segregando saliva por encima de los parámetros habituales.

Carlos Paredes Leví dijo...

Chica cualquiera, perdón, casi te paso por alto. Si tenés alguna amiga que esté buena y piense que es frígida, decíle que se ponga en contacto (nunca mejor dicho) conmmigo. Tengo un infalible método porteño de resultados contrastados.

Carlos Paredes Leví dijo...

Pietra, a vos no hace falta invitarte. Siempre sos bienvenida.

Carlos Paredes Leví dijo...

Juan Pablo: ¡cuánto te falta aún por probar!. Eso me recuerda cierto refrán argentino: "Macho es el que probó y no le gustó".

Carlos Paredes Leví dijo...

Pietra no se arruga ante los desafíos y así aceptó la propuesta de un post sobre el fatídico día.
Hoy no fuimos a la Cabaña porque no hubo quorum.

Carlos Paredes Leví dijo...

Señores y señoras, yo ,para ir a la perdición voy solo. Por ciero "Perdición", de Billy Wilder, es una de mis películas favoritas.

Anónimo dijo...

es una confesión?

Carlos Paredes Leví dijo...

Me debés confundir con otro Juan Pablo....acaso con mi amigo Kalman.

Lebeche dijo...

Ya que estamos gastronómicos, te diré Carlos que, como andaba un tanto depre, compré esta mañana en una carnicería que yo me sé un chuletón de 750 grms, pasé por donde el riojano y adquirí una botella de ese vino del que ya te he hablado me, enchufé la plancha, me preparé un par de tomates y me pegué un papeo en la terraza mirando al mar, cosa mala, oiga. Ha funcionado bastante bien.

Carlos Paredes Leví dijo...

No me extraña que hoy andes mejor de ánimo, amigo Lebeche. El remedio es milagroso.

El Castor dijo...

El maltrato que se da a los animales domésticos es un serio problema y una asignatura pendiente en sociedades pretendidamente civilizadas como la nuestra. Queda mucho por hacer en este aspecto.
Saludos, caballero.

Carlos Paredes Leví dijo...

Coincido al ciento por ciento con usted, Juicioso Castor. Un saludo.

Patricia dijo...

Hola Gracias a la gran recomendacion de Pradero estoy por aqui y veo que efectivamente es muy buen blog para visitar a menudo.


Saludos

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias Patricia, y bienvenida a mi casa.

ig dijo...

   ...y mirá lo que me vengo a encontrar...

Anónimo dijo...

Me perdí, la quedada, el vino y los caracoles, eso me pasa por irme antes de tiempo!!

Espero que os sentaran bien, ya contaréis.

Besos

Carlos Paredes Leví dijo...

Hombre, Ignax, qué agradable sorpresa verte de nuevo...¡¡¡¡.
Sí, cómo habrás deducido, me cambié de sitio.
Bienvenido.

Carlos Paredes Leví dijo...

Mavi; igual de malo es llegar tarde que irse pronto.
Saludos.

Germánico dijo...

En efecto, al menos hubo dos malentendidos.

¡Pobres caracoles!.

Saludos a tod@s menos a un@

Y que no se malinterprete esto último.

Ijon Tichy dijo...

Caramba! Los caracoles de la calle Toledo!

Eso es una delicia gastronómica y no las mariconadas chiquititas que te sirven por ahí en plato grande y cuenta aun mayor.

Carlos Paredes Leví dijo...

Dato para neófitos:
En Andalucía, llaman caracoles a los chiquitos, y cabrillas a los grandes (éstos son los que se encuentran habitualmente en los bares madrileños).
Saludos a todos.

Lebeche dijo...

Datos par neofitos: En Peratallada (Gerona) hay un restaurante-museo de vino, llamado Can Bonay, en el que ponen unos caracoles con manitas de cerdo que es de lo mejor que yo he comido jamás. Además tiene impresionante carta de vinos. Lo recomiendo encarecidamente a todo aquel que no le importe gastarse una pasta en satisfacer el paladar.

Carlos Paredes Leví dijo...

Magnífico dato el tuyo, Lebeche. Se agradece.

Lebeche dijo...

Además el pueblo es precioso.

Carlos Paredes Leví dijo...

Encima¡¡

Carlos Paredes Leví dijo...

Sólo me falta Lebeche, que me cuentes que además, echaste un polvo (en ese precioso pueblo y tras tan gozosa degustación).

Anónimo dijo...

!Qué perra más linda, Carlos¡
¿Qué fue de ella?
un beso

Anónimo dijo...

Pues en los pueblos de la Hoz del Júcar preparan unas caracolillas en salsa que se pueden acompañar con un poco de rabo que ni os cuento como están!!

Qué buenos recuerdos!!!

Lebeche dijo...

¿Encima...encima? Lo del polvo lo prefiero debajo, especialmente después de un buen ágape.

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Flaca. Ahí, en la foto, todavia era cachorro. Ahora, está, junto a mi otro perro (COCO) viviendo con mi ex en el sur de España.
Un saludo,

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Mavi, tu dato tambíén es sumamente interesante y supongo que más de uno tomaremos nota.
Un saludo.

Carlos Paredes Leví dijo...

Lebeche, me temo que has expresado tus gustos pero no contestado a mi pregunta.

Lebeche dijo...

¿Te puedes creer que no me acuerdo? He estado varias veces y casi siempre he salido un poco trastocado. Vino, whisky, buena charla, ya sabes, lo esencial para acabar perjudicado.

pietrapómez dijo...

Mira tu por donde, este verano estuve en Peratallada con mi chico y unos amigos cenandouan carne a la que el ínclito amigo argentino no haría ascos, echando un polvo a la orilla del mar (mas quisiera) y emborrachandome con el mejor blanco del Penedés que he probado...lo malo fué que también la tuve con un soplapollas que no me dejaba entrar a un palacio renacentista antes de la hora de cierre porque no hablaba catalán!!!

Carlos Paredes Leví dijo...

A nosotros no nos engañas Lebeche. Si no te acuerdas, es que no sucedió....

Carlos Paredes Leví dijo...

Lo que yo digo siempre Pietra; "siempre hay alguno que la jode". ¡Qué se hagan una autopsia, coño!

Carlos Paredes Leví dijo...

Pietra, para mí el vino blanco es el Albariño; los otros, son sucedáneos.

Anónimo dijo...

Carlos, ¿eres tú el de la foto?, me refiero al de la camiseta, no al de negro claro, jajaja

Anónimo dijo...

Bueno bueno, ahí me has tocado la fibra. Cuando ví esas imágenes en televisión, si hubiera tendio a ese individuo entre mis manos, lo que tú relatas, se hubiera quedado corto.
Tengo perro y gato, y te puedo decir que son el cariño más desinteresado que he tenido nunca.
Te diré más, este verano empecé mis vacaciones tal que un día y cuando estaba llegando al lugar de destino me llama mi hija que la perrita estaba malita y que la tenían que operar de urgencia al día siguiente, pues cogí un avión a las 7 de la mañana y me volví a Barcelona. Habrá gente que no me entienda, pero mi perra me mira a los ojos con una ternura que me estremece.
En fín, disculpa el rollo que te he metido. Voy a seguir leyéndote, llego desde Juan Pablo
Un beso

pietrapómez dijo...

Carlos: el Albariño me deja harto perjudicada a la mañana siguiente.
Por cierto, suscribo lo de Lebeche: si tienes la posibilidad de marcarte un viajecito a Gerona, no dejes de visitar ese pueblo. Es una maravilla medieval perfectamente conservada, con foso y todo

Carlos Paredes Leví dijo...

Pues sí, Mavi, soy yo en la terraza del Café A Brasileira (Lisboa) haciéndome la foto que todos los turistas boludos se hacen. Eso sí, con la diferencia de que Lisboa es mi ciudad preferida y Pessoa uno de mis escritores más admirados.

Carlos Paredes Leví dijo...

Calma, yo coincido con tu sensibilidad. Para mí son lo mejor que hay: les das cariño y ellos te lo dan multiplicado, y además no tienes que impresionarlos ni mostrarte brillante porque ellos, te quieren por lo que eres en realidad y no por lo que representas. Es un amor de fondo, donde las formas importan un bledo.
Saludos.

Carlos Paredes Leví dijo...

Ay, Pietra, Pietra; el albariño sólo te perjudica a la segunda botella. Tienes que ser más moderada en tus vicios.
Sí, espero visitar ese pueblo tan recomendado, en alguna ocasión.

Churra dijo...

Recuerdo el caso, me impresionaron casi mas esos vecinos defendiendo al tio ese que el hecho en si. (reconozco que me tapo los ojos ante escenas como esas).
Una vez vivi en un pueblo del norte en el que cogieron un perro lo colgaron y lo apalearon , las madres llevaron a los niños a ver es espectaculo.Se me paso por la cabeza la idea de coger a un niño de esos y lanzarle a la carretera justo cuando pasara uno de los camiones madereros, delante de su madre .
Entonces fué cuando me asuste de verdad .

Carlos Paredes Leví dijo...

Para que luego te digan, Churra, que todos los votos son iguales. ¿Cómo alguien con cerebro y sensibilidad puede quedarse tan ancho cuando lo equiparan con uno de esos hijos de puta?. Me aterra esa España profunda que aún subsiste y cuyos genes, de miserabilidad, estupidez y bestialismo, se siguen transmitiendo.
Un saludo.

Carlos Paredes Leví dijo...

Ah, Churra, puedes escribir el nombre de ese pueblo en mayúsculas, para que quede bien visible y lo evitemos en nuestros viajes.

Anónimo dijo...

Jo Carlos, te me has adelantado yo quería el post 100, con lo bien que hubiera venido que me permitieran algún capricho jajaja.

Carlos Paredes Leví dijo...

Mavi,veo que sigues con tu tendencia de llegar tarde y marcharte pronto. Te pierdes lo mejor.

Anónimo dijo...

Vi tu foto, querido y me gustó mucho. Tenés un singular atractivo que seguramente sea aún mayor cuando mirás y hablás.
Un beso muy cálido.

Anónimo dijo...

Si supierais la mañanita que llevo!!!, creo que las únicas sonrisas que he esbozado han sido pasando por aquí, pero... hasta las 3 soy esclava de mis deberes!!!

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias, Flaca, me alivia saber que te gusta mi imagen.
Otro beso.

Carlos Paredes Leví dijo...

Consuélate, Mavi, pensando que ya es viernes y pasan de las dos. El fin de semana se abre como un territorio cargado de promesas...

Anónimo dijo...

Sí, normalmente suele ser así, pero este... no sé, no sé.

Ya veremos, confío en que mejoren las perspectivas (y el ánimo) conforme avance la tarde.

Pero me da a mi que este fin de semana voy a lamentar no tener internet en casa.

Carlos Paredes Leví dijo...

Sin Internet y dada la esperpéntica oferta televisiva, lo mejor es que te dediques a la lectura y los paseos.

Anónimo dijo...

A mis compañeras y a mi nos gustó mucho tu foto. La hemos ampliado e imprimido.Muchos beso, guapetón

Anónimo dijo...

Valoraré tu consejo.

Pásalo bien el fin de semana y ya nos contamos el lunes.

Ah, y no rompas muchos corazones que con lo de la foto puede que te salgan muchos planes jajaja.

Besos!!

Anónimo dijo...

Feliz cumpleaños, amigo.
Te quiero.

Pd, quién es el gay de la foto de abajo?

Lebeche dijo...

Juanpa... me temo que es Carlitos haciendo el boludo en Lisboa (no lo digo yo... lo dice él)

Feliz cumpleaños Don Carlos. (no cumplas más que ya se te empieza a ver perjudicado... o es de hace años :)).

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias Chica Cualquiera y otras, a ver si un día de estos os firmo un autógrafo.
Saludos.

Carlos Paredes Leví dijo...

Gracias Mavi pero los planes se hacen para no cumplirlos y además yo, en cuestiones sentimentales, ando prejubilado. Tengo tantas ganas de liarme con alguien como de darme un beso en el codo.
Un saludo.
A ti te toca pronto ¿no?

Carlos Paredes Leví dijo...

Juan Pablo: sos como el,que decía: "No yo no soy gay, ése es novio". Gracias, che.

Carlos Paredes Leví dijo...

Tienes razón Lebeche, a ver si por lo menos puedo llegar a la edad que aparento. Sobre lo de hacer el boludo; cualquier sitio es bueno.

Ijon Tichy dijo...

En lo de cumplir años, creo que lo mejor es plantarse a tiempo.

No obstante, si a usted no le ha llegado todavía ese momento, don Carlos, aparte de felicitarle, le doy la enhorabuena.

Carlos Paredes Leví dijo...

Eso es lo que yo quisiera, Ijon, plantarme y que el nefasto aniversario pasara desapercibido pero...

Carlos Paredes Leví dijo...

NADIE, SALVO LA FLACA, AMPLIÓ LA FOTO DE MI PERRA Y ME VA A DECIR LO GUAPA QUE ES??????

pietrapómez dijo...

Es guapíiiiiisima, y tiene cara de buena, no como tu

Carlos Paredes Leví dijo...

Pietra, te iba a decir que por fin aparece alguien con sensibilidad y buen gusto pero, con tu última frase lo estropeaste. Así, que te quedas sin piropos.
Los labradores son todos buenísimos. ¿Yo no tengo cara de bueno?

Ijon Tichy dijo...

Sí que tiene cara de buena, aunque la foto sería mejorable (tómeselo como crítica constructiva que lo mío con la fotografía daría para más de una historia digna de los "momentos lamentables" de Pietra).

Carlos Paredes Leví dijo...

Sí, bastante mejorable Ijon. Es una foto casera y no la saqué yo.

pietrapómez dijo...

Ya, claro, ¿cómo ibas a haberla hecho tu? La habrá hecho la que se quedó con la perra...vaaaale, retiro que tienes cara de malo (aunque la tienes, jijiji)

pietrapómez dijo...

Ijon, pues no te preocupes, tengo pensado montar una sección de momentos lamentables invitados...espero que no te cortes cuando sea menester, eh?

Carlos Paredes Leví dijo...

No, la verdad es que no me acuerdo quién la hizo pero seguro que no fui yo, porque rara vez hago fotos.
¿Momentos lamentables?

pietrapómez dijo...

Como el título de mi blog, empanado!! Así que vete pensando, aunque tratándose de tí, seguro que está fabulada la historia...

Ijon Tichy dijo...

Pues solo con lo de las fotos, ya tengo dos temas:

Los dos últimos veranos. En Portugal, por cierto, pero no en el continente.

No me cortaré, pero lo contaré con menos gracia que Pietra, eso seguro.

El Castor dijo...

¿Luba? Parecido a Liuba que es nombre de mujer en ruso. Una vez en Praga oí a una mujer llamando Carmen a su perrita... Así que me vengué poniéndole a la mía Sharka, un nombre de mujer en checo.
Enfin, comentarios insustanciales.

princesa del vértigo dijo...

Luba...así se llama la perra de una queridísima amiga mía, una linda Guantanamera. Como la tuya, la perra es guapísima, boxer, aunque para mi gusto demasiado activa y pegajosa.

Ya que te gustan tanto los perros si quieres te la presento, a la perra digo, y de paso a la dueña que está de muy buen ver y es encantadora, inteligente, divertida, cariñosa...(jo, con lo bien que la estoy vendiendo la tengo que enseñar este comentario para que me invite a comer a su casa, es una excelente cocinera)

Abrazo de oso (que también son muy achuchables)

Carlos Paredes Leví dijo...

Si mis historias son fabuladas o no (me conformo con que resulten fabulosas)es algo que dejo al buen entender del avispado lector.

Carlos Paredes Leví dijo...

O sea, Ijon, que estuviste en Madeira ¿no?

Carlos Paredes Leví dijo...

Nada de insustancial tus comentarios, compañero Castor. Yo también había escuchado Luba como nombre de allá del Este de Europa.

Carlos Paredes Leví dijo...

Princesa, tu amiga tiene buen criterio a la hora de poner nombre a los perros. Sí, insistí para que te invite a comer a tu casa y en cuanto a lo otro, aunque no dudo de que esté buena, la verdad es que yo ya no me intereso por tales asuntos.
Otro abrazo.

Chess dijo...

Eh...madre mia la que se monta en un día...

¿Te puedes creer que me he reído durante todo el relato?.

Qué suerte. A mí casi me da un jamacuco y he empezado a sentir rabia y repugnancia al mismo tiempo.

No sé si por imaginarme a la sangre, o por recordar al hijo puta que mató a su perro a palos y encima el pueblo lo apoyó en el juicio.

Carlos, su perra era preciosa. Me encantan los labradores. Son tranquilos y nobles, más que otros chuchos más pequeños. :)

Un abrazo.

Carlos Paredes Leví dijo...

La verdad, Chesk, es que a veces me sorprende cómo la gente reacciona de diferente manera ante una misma lectura. Hijos de puta como el que cita, por desgracia hay muchos y la justicia hace poco para castigarlos.
También me ayudó a escribir este texto el hecho de que un primo mío haya acogido a un galgo, que como la mayoría de su casta, fue maltratado.
Los labradores, volvemos a coincidir, son una maravilla de perros.
Un saludo.

Ijon Tichy dijo...

Madeira y Azores, Carlos.

No puedo presentar pruebas fotográficas, eso sí, por motivos diversos que ya desvelaré.

Carlos Paredes Leví dijo...

Lo suponía, Ijon, como habías dicho que no era en el continente..

Oniria dijo...

mi primogénito es un pastor de ahora dos años... ufff, q relato más fuerte!

Carlos Paredes Leví dijo...

Fuerte porque nació de la indignación.
Un saludo.